Fernando Alonso convierte en oro aquel volante que conduce cada año y la escudería Aston Martin, con la que ha firmado desde el pasado 1 de enero, quiere que lo próximo sea su nuevo SUV.
El DBX707 parece que le ha dado nuevas alegrías y en sus redes sociales ha puesto «expectativas superadas. Un coche de ensueño». Y parece que razón no le falta por los números que arroja, es uno de los SUV más potente del mundo y solo al alcance de unos pocos.
La versión 707 del DBX viene con un conjunto de modificaciones para que su poder pueda ser explotado al máximo. De su aspecto exterior destaca su parrilla frontal más grande, nuevas tomas de aire y conductos de enfriamiento de frenos y un alerón trasero de fibra de carbono. Amortiguadores recalificados, nueva programación ESP para una mayor libertad de expresión, nuevos turbocompresores y sistema de escape específico son algunas de las novedades que presenta este diseño. Además, este SUV de 5,04 metros de largo y 2.245 kilos de peso cuenta con frenos carbocerámicos con discos de 420 mm delante y 390 mm detrás y llantas de 22 pulgadas.
El interior del vehículo presenta un techo de Alcantara, asientos calefactables con las legendarias alas de Aston Martin bordadas en los respaldos, un volante de corte deportivo, acabados en cromo oscuro o en fibra de carbono de forma opcional y una nueva consola central que brinda acceso instantáneo a las funciones más importantes del automóvil –modos de conducción, modo de caja de cambios manual y control de suspensión–.
Bajo el capó esta bestia esconde un motor V8 biturbo de 4.0 litros que brinda una potencia de 707 CV y 900 Nm de par. Además, puede alcanzar una velocidad máxima de 310 km/h y es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,3 segundos. El bloque viene asociado a una transmisión automática Speedshift de nueve velocidades firmada por AMG.
Para aquellos que deseen hacerse con este modelo deben saber que su precio va desde los 248.000 euros.
