Neiman Marcus en una elegante velada en Los Ángeles, ha presentado los que son considerados como los regalos de lujo, los más exclusivos para esta navidad, en su ya tradicional «Libro de la Navidad»
Ha sido en los Paramount Studios en Los Ángeles, donde los asistentes al cocktail pudieron disfrutar de los siete productos icónicos, seleccionados entre más de 200 para estas navidades, regalos que solo están al alcance de unos pocos privilegiados.
El regalo que causó más sensación, el más sublime de todos, ha sido el diamante de corazón mogol de 30,86 quilates, con un precio de 6,1 millones de dólares.
De color D, internamente impecable, tipo lla y montada en un engaste de platino de Harry Winston
Como señala el catálogo, es «la máxima expresión del amor eterno y un ejemplo de las piedras preciosas únicas e incomparables que ofrece Neiman Marcus».
Además de poseer esta obra maestra, la futura propietaria tendrá la rara oportunidad de cambiarle el nombre a la joya, y podrá poner el que ella quiera. El Instituto Gemológico de América (GIA) emitirá una monografía confirmando el cambio.
Fue también muy comentada la «Fiesta de los locos años veinte» donde solo 20 personas y por el módico precio de 395.000 dólares, podrán disfrutar en «El Teatro Apollo» de exquisitos entremeses y cócteles, y una cena de tres platos preparada por un chef con estrella Michelin, dentro de una atmósfera única, con música en vivo en el escenario.
Una vajilla personalizada, de la emblemática firma portuguesa «Vista Alegre» y un viaje único a este bello país, será el regalo que estas navidades puedan disfrutar un limitado número de parejas, con un coste de 80.000 dólares, durante seis días, la pareja recorrerá los más bellos y románticos pueblos de Portugal, con aventuras en yate, recorridos privados por Lisboa y un recorrido en helicóptero sobre la exuberante zona costera de Arrábida.
Lo más destacado del viaje será la visita a Vista Alegre, una de las marcas portuguesas de porcelana más prestigiosas, para diseñar sus propios cubiertos de porcelana fina para 12 personas.
Los asistentes disfrutaron de un espectáculo, una actuación de baile en vivo, una historia de amor ambientada en «It Had to Be You». La interpretación contemporánea de la canción clásica está a cargo de la cantante Rachel Norman, con una coreografía del galardonado con un Emmy, Al Blackstone.
