En septiembre de 2023, dinh van amplía su colección Le Cube Diamant con nuevos modelos inéditos. Colgantes y pulseras XXL, anillos de dos hileras, ear cuffs… completan esta colección cuyos orígenes se remontan a los años 70, bajo la mirada del fundador epónimo de la Maison, Jean Dinh Van.
La hazaña de esta colección: permitir llevar a diario y sin ostentación la piedra más preciosa de todas.
Le Cube Diamant es una colección que da vida al encuentro de dos formas geométricas esenciales: el círculo y el cuadrado. Inspirándose en un inteligente juego de contrastes entre la redondez del diamante –signo de la espiritualidad– y el cuadrado –símbolo de la estabilidad–, la colección Le Cube Diamant demuestra la importancia de la forma en el lenguaje de dinh van.
Dos nuevos collares inéditos
Por primera vez, Le Cube Diamant se redescubre con una versión del cubo totalmente engastada con diamantes. Resaltado en un colgante con un volumen escultural, Le Cube Diamant adopta una inusual forma de rombo, un guiño al pavé dinh van. Un cubo excepcional que no se cansará de admirar desde todos los ángulos
1. Colgante Le Cube Diamant XL y cadena dinh van S, oro amarillo y diamantes, 7.000 €.
2. Colgante Le Cube Diamant XL y cadena dinh van S, oro blanco y diamantes, 7.350 €.
El icónico anillo de dos hileras se reinventa
El anillo de dos hileras Le Cube Diamant, inicialmente de oro blanco y pavé de diamantes, suma ahora 3 nuevas versiones. No solo está la versión de oro amarillo y pavé de diamantes, sino también la de oro blanco y oro amarillo sin hileras de pavé, que se prestan al juego de la acumulación y transmiten una mayor sencillez.
3. Anillo Le Cube Diamant de dos hileras, oro amarillo y diamante, 2.450 €.
4. Anillo Le Cube Diamant de dos hileras, oro blanco y diamante, 2.550 €.
5. Anillo Le Cube Diamant de dos hileras engastadas, oro amarillo y diamantes, 4.680 €.
El pendiente ear cuff, una nueva incorporación a la colección
El diseño Le Cube Diamant de dos hileras está ahora disponible como pendiente ear cuff. Un nuevo estilo decididamente gráfico y moderno, perfecto para lucirlo solo o junto a unos pendientes de botón de la misma colección.
6. Pendiente ear cuff Le Cube Diamant de dos hileras, oro amarillo y diamante, 1.790 €.
7. Pendiente ear cuff Le Cube Diamant de dos hileras engastadas, oro amarillo y diamantes, 2.900 €.
Dos piezas excepcionales y exclusivas
Por último, la Maison desvela una pieza excepcional con la pulsera Le Cube Diamant XXL de oro blanco totalmente engastada de diamantes. Un exclusivo collar corbata con cadena dinh van y dos cubos, también engastados de diamantes, completa este dúo de piezas.
Este collar, que dibuja sensualidad con sus siluetas características, cuenta con una parte central móvil que permite ajustarlo en infinitas posiciones. Dos propuestas de excepción que permitirán elevar al máximo la elegancia de cualquier look.
8. Collar Le Cube Diamant XL engastado y cadena dinh van M, oro blanco y diamantes, 14.000 €.
9. Pulsera flex Le Cube Diamant XL, oro blanco y diamantes, 19.850 €.
Colgante Le Pavé dinh van, plata, primer modelo (1969).
Le Cube Diamant, un icono esculpido en 1969, por Bérénice Geoffroy-Schneiter.
Sería un error impregnar a las joyas dinh van de un perfume nostálgico. Si bien nacieron en una época fértil en revoluciones sociológicas y estéticas (con la emancipación sexual y la llegada del diseño como telón de fondo, las mujeres toman la píldora, bailan en Chez Castel, llevan vestidos futuristas de Paco Rabanne o minifaldas de Courrèges y leen a Françoise Sagan…), son joyas claramente contemporáneas. ¿Cómo explicar si no el entusiasmo nunca desmentido desde hace medio siglo por estas formas atemporales, que evocan inconscientemente al Cuadrado de Malevich?
« El cuadrado no es una forma subconsciente. Es la creación de la razón intuitiva. ¡El rostro del art nouveau! El cuadrado es un recién nacido vivo y majestuoso. El primer paso de la creación pura en el arte. Antes de él, había desfiguraciones ingenuas y copias de la naturaleza. Nuestro mundo artístico se ha vuelto nuevo, no objetivo, puro. Todo ha desaparecido, solo queda la masa de materiales con los que se construirá la forma nueva. En el arte suprematista, las formas vivirán como todas las fuerzas vivas de la naturaleza […]. Cada forma es libre e individual. Cada forma es un mundo», profetizó el pintor ruso en 1915.
Tan bellas por un lado como por otro, minimalistas sin dejar de ser sensuales, a caballo entre las formas primordiales y el arte contemporáneo, las joyas de la firma dinh van trascienden épocas y géneros desde hace más de cincuenta años, son atemporales. Integrando el arte en la vida, aboliendo las fronteras entre diseño, escultura y arquitectura, bajan de su pedestal al encuentro de la mujer y el hombre de nuestro tiempo. De Bruselas a Madrid, pasando por Ginebra y Nueva York, son paladines de las líneas puras, transmisoras de la modernidad… Bérénice Geoffroy-Schneiter Dinh van–Edición Assouline (2015).
